«¡Nunca más la guerra!», clama León XIV
«Nunca más la guerra». Con este llamado, el papa León XIV exhortó a los miles de fieles apostados en la Plaza de San Pedro donde el nuevo pontífice dirigió el rezo Regina Coeli, en la que aprovechó de realizar una breve intervención sobre asuntos de actualidad.
El papa pidió el alto al fuego inmediato en Ucrania y Gaza e hizo un llamado a los gobernantes poderosos para que acaben con los conflictos.
Recordó que el 8 de mayo se cumplieron 80 años del final de la «tragedia» de la Segunda Guerra Mundial, que causó -dijo- 60 millones de víctimas y, como ya hizo el jueves tras su elección, abogó este domingo por «el milagro de la paz», que fue una de sus palabras más mencionadas entonces.
El actual escenario «dramático» llevó a León XIV a dirigirse «a los grandes del mundo para un llamado siempre actual: ¡Nunca más la guerra!».
Ya en concreto, el pontífice estadounidense reclamó el máximo esfuerzo para una paz duradera y justa en Ucrania y dijo llevar en su corazón el «sufrimiento del pueblo ucraniano».
«Llevo en mi corazón el sufrimiento del amado pueblo ucraniano», dijo León XIV, quien abogó porque se haga todo lo posible para alcanzar «lo más pronto posible» una paz «auténtica, justa y duradera».
Además, reclamó que todos los prisioneros de esa guerra entre Rusia y Ucrania sean puestos en libertad y que los niños puedan volver a sus casas.
Dolor profundo por Gaza
Además, León XIV exigió un alto al fuego «inmediato» en la Franja de Gaza y abogó porque se preste ayuda humanitaria a la «agotada» población.
«Me duele profundamente lo que ocurre en la Franja de Gaza», afirmó el pontífice, quien exigió que pare el fuego, se proporcione ayuda a la población civil y sean liberados «todos» los rehenes.
Después dijo acoger con satisfacción el acuerdo de alto el fuego entre India y Pakistán y mostró su deseo de que las próximas negociaciones permitan alcanzar un acuerdo «fiable» entre esas dos potencias nucleares.
El mensaje pastoral
Esas palabras de León XIV -hasta el jueves el cardenal Robert Francis Prevost- fueron las alusiones a asuntos de actualidad, aunque previamente hizo unos comentarios de carácter pastoral.
Así afirmó ante los fieles en el balcón central de San Pedro que la Iglesia necesita vocaciones, «especialmente al sacerdocio y a la vida religiosa» y pidió que a los jóvenes se les escuche y acoja para seguir ese camino.
«¡La Iglesia los necesita!», dijo el papa al aludir al deseo de que haya más vocaciones religiosas y añadió que es importante «que los jóvenes encuentren en nuestras comunidades acogida, escucha, estímulo en su camino vocacional y que puedan contar con modelos creíbles de entrega generosa a Dios y a sus hermanos».
«No tengan miedo, acepten la invitación de la Iglesia», dijo el papa.
Destacó que su primer domingo como Obispo de Roma es el del Buen Pastor, el cuarto del tiempo de Pascua, que en el Evangelio se recuerda como aquel en el que «Jesús se revela como el verdadero Pastor, que conoce, ama y da la vida por sus ovejas».
Desde hace 62 años este domingo se celebra la Jornada Mundial de Oración por las Vocaciones, motivo por el cual León XIV aludió ala necesidad de que la Iglesia cuente con más de ellas.
Antes del Regina Coeli, que en este período posterior a la Pascua sustituye al Angelus, León XIV ofició misa junto a la tumba de San Pedro, situada en las llamadas Grutas Vaticanas de la Basílica del mismo nombre, informó la Santa Sede.
Tras la misa, el pontífice se acercó a las tumbas de sus antecesores que están en esas Grutas y rezó ante ellas.