Noboa encargó por cuatro días la Presidencia de Ecuador a vicepresidenta temporal
El presidente de Ecuador, Daniel Noboa, informó este martes que dejará a cargo de la Presidencia a la vicepresidenta temporal, Cynthia Gellibert, por un período de cuatro días. Esto ocurre en medio de la campaña electoral, en la que el mandatario busca consolidar apoyo popular para gobernar el país hasta 2029.
La medida quedó registrada en un decreto que establece que el encargo será válido desde las 17:00 hora local (22:00 GMT) del 9 de enero hasta las 16:59 (21:59 GMT) del 12 de enero de 2025.
La decisión responde a una «circunstancia de fuerza mayor» debido a que los actos públicos del presidente podrían ser interpretados como proselitismo político, lo que podría desencadenar denuncias de infracción electoral. En el decreto, se menciona que esta situación impide temporalmente el ejercicio de sus funciones.
Reclamos políticos
El documento también precisa que, durante su ausencia, Noboa «no utilizará ningún recurso público, ni recibirá remuneración alguna». Además, insta al Consejo Nacional Electoral (CNE) a coordinar la seguridad del mandatario. Se aclara que la ausencia «podrá terminar anticipadamente» si así lo decide.
Esta decisión coincide con el inicio de la campaña para las elecciones generales del próximo 9 de febrero, en las que Noboa es uno de los 16 aspirantes a la Presidencia. Además, se produce un día después de que los candidatos presidenciales Henry Cucalón, de Construye, y Henry Kronfle, del Partido Social Cristiano, solicitaran al CNE intervenir ante la falta de una solicitud de licencia por parte de Noboa para hacer campaña.
Los críticos argumentan que Noboa estaría incumpliendo el artículo 93 de la ley electoral, que obliga a quienes buscan la reelección a solicitar licencia sin sueldo desde el inicio de la campaña, en este caso, desde el pasado domingo. No obstante, el ministro de Gobierno, José de la Gasca, asegura que «no es obligatorio» en este caso, ya que Noboa no busca la reelección sino concluir el mandato del expresidente Guillermo Lasso (2021-2023), que dejó el poder al decretar la «muerte cruzada», una figura constitucional que disuelve el Parlamento y adelanta las elecciones generales.
Tensión con la vicepresidenta electa
El encargo a Gellibert se realizó pese a que la vicepresidenta electa en las urnas, Verónica Abad, había anunciado que asumiría la Presidencia durante la ausencia de Noboa, tal como lo indican las leyes. Sin embargo, el silencio respecto a la licencia para realizar proselitismo impidió que, el pasado domingo, Abad concretara su anuncio de asumir el poder mientras dura la campaña.
Noboa y Abad han mantenido un enconado enfrentamiento desde el inicio del Gobierno, en noviembre de 2023, cuando el mandatario la designó embajadora en Israel. Desde entonces, Abad ha denunciado un supuesto hostigamiento para forzarla a renunciar y evitar que deleguen en ella la Presidencia durante el período electoral.
Debido a las crecientes tensiones en Oriente Medio, se dispuso el traslado de Abad a Ankara, pero el Ministerio de Trabajo alegó que no llegó en el tiempo establecido -aunque Abad sostiene lo contrario- y la suspendió por cinco meses. Sin embargo, el pasado 23 de diciembre, una jueza levantó la sanción al fallar a favor de Abad.
Tras conocer el fallo, Abad acudió a la Vicepresidencia, pero no pudo ingresar, ya que las puertas estaban cerradas y custodiadas.
Mientras ella reclamaba desde la acera su derecho a entrar en la Vicepresidencia, Noboa emitió un decreto que nuevamente la enviaba al exterior, esta vez como consejera temporal a la embajada en la capital de Turquía, a donde debía llegar antes del 27 de diciembre, pero no lo hizo.
La defensa de Abad sostiene que la ley establece un plazo de 30 días para realizar el desplazamiento, pero el Ejecutivo interpretó esta falta como una «ausencia temporal». Por ello, designaron como vicepresidenta temporal a Sariha Moya, quien fue reemplazada por Gellibert el pasado sábado debido a razones de salud.