Bassil: Es hora de resolver el caso de los islamistas detenidos, en nombre de la justicia y de la sangre de los mártires
El presidente del Movimiento Patriótico Libre, el diputado Gebran Bassil, dijo en un discurso pronunciado durante la cena de la Asociación de Abogados del Movimiento Patriótico Libre que “nos enorgullece haber presentado modelos de abogados que constituyen una bella imagen de la justicia y una voz que clama contra el silencio mortal que reina cuando se trata de la justicia”. Añadió: “Son muchas las ocasiones en las que se vulnera la justicia, por lo que pedimos a los abogados del Movimiento que no cierren los ojos, que mantengan su voz alta y que no callen ante la vulneración de los derechos, porque hemos visto que un solo abogado que trabaja por la justicia puede marcar la diferencia”.
Bassil dijo: “Como movimiento patriótico libre, podemos estar fuera del poder, pero no estamos fuera de nuestros deberes nacionales, por lo que nos enfrentamos a una importante reivindicación sindical este año, pero hay una reivindicación nacional que es más importante, que es cómo devolver a la justicia su prestigio y cómo devolver a la judicatura su independencia y a los ciudadanos su confianza en la judicatura, y ese es el gran reto”.
Y explicó: “El poder judicial es la piedra angular de la construcción del Estado, y no hay reforma ni Estado ni existencia sin un poder judicial independiente y valiente que aplique la ley, y nuestra prioridad debe ser romper el círculo vicioso de la dependencia y la injerencia, porque mata el espíritu de la justicia, y los abogados son los guardianes de la justicia”.
Bassil añadió: “Hoy les decimos a los abogados que no dejen que la justicia sea rehén de la corrupción, el miedo o la dependencia. El Colegio de Abogados es la conciencia de la justicia, no una entidad política, y queremos que sea fuerte, libre e independiente, porque no hay justicia sin libertad ni libertad sin responsabilidad, y ese es el papel del Colegio de Abogados”. Y añadió: “Si hay una resistencia real que debemos llevar a cabo, es la construcción de un Estado basado en el principio de la justicia”.
Bassil señaló que “lo que prevalece es la impunidad, y aquí es donde entra la responsabilidad de los abogados”, y añadió: “El pueblo libanés está oprimido, y cómo no va a estarlo, cuando hay casos que le conciernen y que siguen sin ser juzgados. Daré tres ejemplos, el primero de ellos es la explosión del puerto. ¿Cómo es posible que, tras cinco años, no se haya dictado una resolución de instrucción y, como mínimo, se haya presentado una acusación si se trata de un acto de sabotaje o de mala gestión y negligencia, y si realmente fue intencionado o si todo el Estado y sus instituciones fueron negligentes?”.
Bassil afirmó que “el segundo ejemplo es la auditoría penal, que el presidente Michel Aoun solicitó desde 2005 y no pudo imponer hasta que se convirtió en presidente de la República en 2020, es decir, hace cinco años. La pregunta es: ¿Es aceptable que, cinco años después de que el Estado libanés firmara un acuerdo con una empresa especializada, el Ministerio de Finanzas y el Banco de Líbano se nieguen a entregar los documentos necesarios a la empresa auditora, cuyo informe preliminar ha confirmado que el déficit del Banco de Líbano asciende a 72 000 millones de dólares?”.Y añadió: “Imaginen que hay un déficit en el banco central de 72 000 millones y que, a día de hoy, se niegan a entregar los documentos porque entonces aparecerían los responsables y se verían obligados a rendir cuentas, lo que es como una forma de eludir la justicia”.
Bassil continuó: “El tercer ejemplo es el dinero de los depositantes. El partido presentó un proyecto de ley en la Cámara de Diputados y exigió la devolución del dinero que se transfirió de manera discrecional al extranjero, pero el Estado no aprueba la ley de control de capitales para permitir la fuga de capitales al extranjero”. Y añadió: “Por lo tanto, no lo consideran ilegal, pero ¿es legal permitir que una persona transfiera 600 millones de dólares y a otra no permitirle transferir 6000 dólares para pagar la matrícula de la universidad en el extranjero?”.Y añadió: “Desde hace años se niegan a aprobar una ley para recuperar los fondos transferidos al extranjero en los últimos años, que se estiman en 40 millones de dólares, es decir, la mitad del déficit financiero”.
Bassil afirmó: “Existe una justicia fragmentada que absuelve, pero no dice quién es el culpable, así como una justicia aplazada que se retrasa para absolver porque no tiene otra forma de aplazar la sentencia”. Y explicó: “Por ejemplo, el Consejo Consultivo del Estado no está obligado a cumplir un plazo, por lo que no emite el fallo, y en el Consejo Constitucional, por ejemplo, se niegan a alcanzar el quórum, por lo que no emiten el fallo, como en el caso de la ley del voto de los expatriados”.Y añadió: “Esto sin hablar de los expedientes acumulados en los cajones, y la gran prueba es que en las cárceles hay un alto índice de hacinamiento, que alcanza el 340 %, lo que provoca malestar”.
Y continuó: “No es aceptable que no se resuelva el caso de los detenidos islamistas y que siga siendo objeto de controversia durante décadas”, y explicó: “Si pensamos con justicia, podemos dividirlos en dos grupos: los que aún no han sido juzgados y han pasado en prisión más tiempo del que podrían haber cumplido si se les hubiera declarado culpables. Y el grupo al que se le han dictado sentencias por motivos políticos relacionados con su apoyo u oposición al antiguo régimen sirio. Si hay que tratar estos dos casos con flexibilidad, se puede conceder un indulto especial”.Añadió: “Por otra parte, hay motivos para mostrarse estrictos en la aplicación de la justicia, ya que hay personas que han sido condenadas por agredir a miembros del ejército libanés y cuyo delito ha sido demostrado. En ambos casos, no se puede ser indulgente con ellos, por respeto a la justicia y a los mártires del ejército libanés, y no se les puede someter a ningún tipo de negociación”.Afirmó: “Ha llegado el momento de resolver este asunto en su conjunto, por respeto a los mártires y al sentimiento de la comunidad suní de que está siendo objeto de ataques, lo cual es inadmisible, por lo que debe aplicarse la justicia y todos los oprimidos deben salir de prisión”.
Bassil abordó el tema de las noticias falsas y fabricadas que perjudican los intereses de las personas, y dijo que un ejemplo sencillo de ello es lo que ocurrió con las aguas de Tannourine. Aclaró: “Independientemente de su nombre y su propietario, si alguien decide escribir sobre ella y difamar a su propietario, ¿quién indemnizará al propietario de la empresa por todo el daño causado a su reputación, el Tribunal de Publicaciones? Dijo: “Lo mismo se aplica a las noticias falsas sobre personas y grupos que se dedican a cualquier ámbito, por lo que en el movimiento estamos preparando una propuesta de ley para endurecer las penas fuera del Tribunal de Publicaciones en los casos en que cualquier persona pueda atacar a través de las redes sociales la reputación, la dignidad o los intereses de cualquier otra persona”.
Bassil añadió: “Aquí llegamos al asesinato político al que nos hemos visto sometidos como movimiento patriótico libre, y aquí no se ataca a una persona, sino a un grupo, a una ideología, a un partido y a personas que tienen sentimientos, y el daño aquí es irreparable”.Y dijo: “Quien quiera escribir lo que sea y causar daño moral y material a una persona o a un partido y quede impune, ¿quién compensará la dignidad de este grupo cuando nadie vuelva a tener protegida su dignidad y su reputación?”. Señaló que “se ha vuelto imprescindible sacar al poder judicial de la subordinación y aprobar una ley de independencia judicial de forma seria y no de la forma teatral en que se ha hecho”, indicando que “es bueno que el presidente de la República haya devuelto la ley, porque estábamos preparando un recurso para poner de manifiesto sus lagunas”. Dijo: “Lo ridículo es que aprobaron las designaciones y al día siguiente fueron al Parlamento para aprobar la ley de independencia del poder judicial”.
Señaló “el tema de sacar al poder judicial de la tutela interna que se manifiesta cada vez que hay designaciones judiciales” y dijo: “Ya saben cómo se chantajeaba a los jueces, ya fuera abriendo o cerrando los expedientes”. Añadió: “El juez es libre en sus ideas políticas y se le prohíbe ejercerlas en el tribunal o al dictar sentencia, pero no se le prohíben sus derechos civiles ni cómo piensa políticamente, hasta el punto de ser castigado judicialmente por su afiliación política y desterrado o castigado por sus ideas políticas”. Añadió: “En cuanto a la dependencia del extranjero y la tutela, es un panorama nuevo que vemos en el Líbano y que afecta al Parlamento con la tutela del extranjero, así que si se nos pide que aprobemos la ley de independencia del poder judicial, ¡lo haremos! Lo mismo ocurre con la reestructuración de los bancos: les decimos en el Parlamento que esta ley no es válida y la impugnamos, pero ellos la aprueban y, cuando se lo pide el Fondo Monetario Internacional, la vuelven a incluir en la agenda, como la ley de secreto bancario, que se ha vuelto a presentar cuatro veces en el Parlamento porque fue rechazada desde el extranjero”.
Bassil añadió: “La última muestra de tutela sobre el Líbano es la circular del ministro de Justicia a los notarios sobre un tema que excede sus competencias y las de ellos, y que está fuera del ámbito de su trabajo.Bassil dijo: “¿Qué es esta humillación? ¿Acaso las sanciones sustituyen a la ley o pertenecen al Estado que las ha dictado para que ustedes se sometan a ellas, y no les da vergüenza decir que estamos obligados a hacerlo porque así lo pide Estados Unidos? Y añadió: “Por lo tanto, sacar al poder judicial de la dependencia interna y externa es nuestra responsabilidad y la responsabilidad del sindicato”.
Bassil afirmó: “No debe haber monopolio en el sindicato para nadie, porque el sindicato es un edificio nacional para todos y, por lo tanto, las elecciones son una gestión para mejorar el trabajo sindical y una oportunidad para participar cada vez”, y dijo: “Consideramos que nuestra ausencia involuntaria no es beneficiosa y espero que nuestro regreso y nuestra participación a través del abogado Wassim Bou Taie sea un regreso adecuado. Ha llegado el momento de ser un movimiento activo, participativo y comprometido, con una voz libre y clara en el sindicato, y nuestro deber es no politizar el trabajo sindical”, exigiendo “apoyar a Bou Taie y trabajar para que tenga éxito”.