EE.UU. aseguró haber construido «bases muy sólidas» con China tras charlas comerciales
Las delegaciones de EE.UU. y China han construido unas «bases muy sólidas» en sus negociaciones comerciales, aseguró el secretario del Tesoro del país norteamericano, Scott Bessent, tras el segundo día de conversaciones con la parte china en Kuala Lumpur, a donde hoy llegó el presidente estadounidense, Donald Trump.
«Tenemos unas bases muy sólidas de cara a la reunión de los líderes (Trump y su par chino, Xi Jinping) del jueves. Hablamos sobre comercio, tierras raras, fentanilo, TikTok y la relación general entre ambos países», afirmó Bessent a los medios de comunicación en la Torre Merdeka 188 de Kuala Lumpur, donde han tenido lugar las dos jornadas de negociaciones entre ambas potencias.
El secretario del Tesoro describió el diálogo con la comitiva china, liderada por el viceprimer ministro He Lifeng, como «constructivo, de gran alcance y profundidad», y expresó su confianza en que esas «bases» -de las que no ofreció detalles concretos- garantice un «encuentro exitoso» entre Trump y Xi, previsto el jueves en Corea del Sur.
Unas horas antes, el representante comercial estadounidense, Jamieson Greer, indicó que EE.UU. y China estaban revisando los «últimos detalles» de un posible acuerdo, al que faltaría obtener el visto bueno de los líderes de las dos potencias.
«Anoche dedicamos mucho tiempo, y también esta mañana, a hablar sobre un posible marco para avanzar. Creo que estamos afinando los últimos detalles del tipo de acuerdo que los líderes podrán revisar y decidir si desean concluir conjuntamente», dijo el funcionario estadounidense.
La segunda jornada de negociaciones económicas y comerciales coinciden con el primer día de Trump en Kuala Lumpur, primera parada de una gira asiática que lo llevará también a Japón y Corea del Sur, y cuyo principal objetivo es el esperado encuentro con Xi el 30 de octubre.
El diálogo comercial entre Washington y Pekín transcurre en un clima de tensión después de que China impusiera a mediados de octubre nuevas restricciones al comercio de tierras raras, cuya producción y exportación prácticamente monopoliza.
En respuesta, el presidente estadounidense amenazó con elevar al 100 % los gravámenes a los productos chinos a partir del 1 de noviembre.
Durante una breve parada del Air Force One en Catar para repostar antes de despegar rumbo a la capital malasia, Trump expresó su esperanza de lograr un «acuerdo completo» con Xi.
«Quiero que nuestros agricultores estén bien protegidos. Y él (Xi) también quiere cosas (...). Creo que tenemos muy buenas posibilidades de alcanzar un acuerdo realmente integral», afirmó el republicano.